Dadas las diversas limitaciones y desafíos que puede enfrentar un caballo senior, su manejo alimentario debe ajustarse cuidadosamente para ayudar a mantener la condición corporal, lo que puede ser un verdadero desafío en esta etapa de la vida.
Agua
El control de la ingesta de agua es fundamental en los caballos mayores.
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En invierno, el agua fría puede desalentar el consumo de agua, por lo que es importante garantizar que se satisfagan las necesidades de hidratación.
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En verano, el aumento de las temperaturas exige una mayor ingesta de agua para mantener una adecuada hidratación.
Agregar electrolitos a la dieta puede ser una estrategia útil.
Forraje
El forraje es un componente vital de la dieta. En caballos mayores, es especialmente importante utilizar forraje de alta calidad, ya que tanto la ingesta como la eficiencia digestiva pueden verse reducidas, especialmente si existen problemas dentales.
Si el forraje es suficiente para cubrir los requerimientos energéticos, entonces se debe agregar un equilibrador para proporcionar proteínas (especialmente lisina), vitaminas y minerales en cantidades adecuadas.
Si el forraje no es suficiente, considere añadir un alimento para caballos mayores o un suplemento a base de grasa (como aceite de linaza) para aumentar el aporte energético. Elija piensos en puré, que son más fáciles de masticar y digerir para caballos con problemas dentales.
Si el consumo de forraje se ve comprometido debido a problemas dentales, puedes reemplazarlo con pellets o cubos a base de forraje remojados en agua.
Alimentos concentrados
Los alimentos concentrados específicos para personas mayores generalmente incluyen ingredientes fibrosos como alfalfa o pulpa de remolacha, y están formulados para administrarse en cantidades mayores que los alimentos estándar, cubriendo así parte de los requerimientos de fibra.
Debido a que la absorción de proteínas disminuye con la edad, los alimentos para adultos mayores deben tener:
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Un mayor contenido de proteínas
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Sea una buena fuente de lisina (el aminoácido más limitante para los caballos)
La inclusión de grasa ayuda a aumentar la densidad calórica sin aumentar los carbohidratos no estructurales (CNE), como el almidón y los azúcares. Esto es especialmente importante para caballos con enfermedad de Cushing o resistencia a la insulina.
Los caballos mayores también pueden sufrir una eficiencia digestiva reducida, por lo que se deben adaptar los niveles de vitaminas y minerales en su alimentación.
También son más propensos al estrés oxidativo, por lo que se deben asegurar niveles adecuados de antioxidantes como las vitaminas C y E.
Suplementación
La suplementación con probióticos puede ser beneficiosa.
Para los caballos con afecciones articulares también es aconsejable el uso de suplementos condroprotectores.